La Finka es una bendición, su fundador en busca de un lugar rodeado de naturaleza para poder vivir, encuentra la propiedad donde actualmente se encuentra ubicado el restaurante. Después de evaluarlo, combina su amor por la naturaleza con su pasión por la cocina y decide brindarles a los guatemaltecos un restaurante campestre, rodeado de naturaleza, comida casera, porciones generosas a un precio accesible y es así como nace el proyecto. Hoy por hoy el restaurante ofrece un menú variado con opciones de desayuno, caldo de gallina y de res, así como una tradicional parrilla, combinando su experiencia como parrillero en Buenos Aires, Argentina con productos guatemaltecos como el adobado y la longaniza. La Finka cuenta con 3 manzanas de terreno, donde puede acoger a 122 comensales simultáneamente, así como animales de granja para que los pequeños puedan interactuar con los mismos, la propiedad cuenta con una nacimiento de agua natural y una pileta artificial donde los comensales pueden pescar tilapia.
Polecany
